En el campo de la purificación de agua industrial, una tasa de desalinización constantemente alta es crucial para el rendimiento del sistema de ósmosis inversa (RO). Sin embargo, en las aplicaciones del mundo real, a menudo surgen problemas inesperados. Este artículo explora un caso práctico de un proyecto de ósmosis inversa de 200 m³/h en una central térmica, donde el sistema mostró una tasa de desalinización significativamente baja, cayendo por debajo del 90% a pesar de que todos los parámetros de diseño parecían normales.
Al examinar este incidente, esperamos proporcionar información valiosa para los ingenieros y operadores de plantas que enfrentan problemas similares en sistemas de agua pura a gran escala.
El diseño original del sistema de ósmosis inversa se basó en el tratamiento del agua ablandada con cal, con los parámetros clave del agua de alimentación establecidos de la siguiente manera: pH 7,0-8,0, dureza <0.1 mmol/L, and conductivity <500 μS/cm. The expected desalination rate was over 98%.
Sin embargo, durante la inspección de rutina, se observaron varias discrepancias:
Estas desviaciones afectaron significativamente el rendimiento de la membrana. En particular, los elevados niveles de pH y dureza promovieron la incrustación y redujeron la eficiencia del rechazo de iones, lo que llevó a una tasa de desalinización que se redujo a tan solo el 86%.
Si se enfrenta a problemas similares, es fundamental comparar primero la calidad del agua en tiempo real con las especificaciones de diseño de su sistema para identificar las primeras señales de advertencia de bajo rendimiento.
Al identificar el desajuste entre los parámetros reales del agua de alimentación y las especificaciones de diseño del sistema de ósmosis inversa, se inició un diagnóstico integral para descubrir las causas fundamentales detrás de la disminución de la tasa de desalinización.
Las principales acciones diagnósticas fueron:
Los hallazgos sugirieron que el problema central era la incrustación química debido a un pretratamiento insuficiente y una dureza elevada en el agua de alimentación. Los resultados de la autopsia de la membrana (cuando estaban disponibles) confirmaron aún más el ensuciamiento de carbonato de calcio e hidróxido de magnesio.
Este diagnóstico destacó la importancia del monitoreo de la calidad del agua en tiempo real y la adaptación de las estrategias de pretratamiento para evitar la degradación de la membrana a largo plazo.
Después de un análisis exhaustivo, se recomendaron varias acciones correctivas para restaurar y mejorar el rendimiento de desalinización del sistema de ósmosis inversa:
Estas acciones no solo mejoraron la tasa de desalinización, sino que también prolongaron la vida útil de las membranas, redujeron el tiempo de inactividad y mejoraron la estabilidad del sistema. Para las plantas que enfrentan problemas similares, la adopción de estas estrategias puede producir beneficios medibles y evitar pérdidas de rendimiento.
Este estudio de caso demostró que incluso los sistemas de agua pura bien diseñados son susceptibles a una disminución del rendimiento debido a ineficiencias de pretratamiento que se pasan por alto, un monitoreo inadecuado y un mantenimiento inadecuado. A través de un diagnóstico sistemático y medidas correctivas personalizadas, se identificaron y resolvieron las causas fundamentales detrás de la baja tasa de desalinización.
Los puntos clave para los operadores industriales incluyen:
Al compartir esta visión operativa, nuestro objetivo es ayudar a otros profesionales del tratamiento de aguas industriales a optimizar sus sistemas de ósmosis inversa. Para obtener más asistencia o asesoramiento técnico personalizado, no dude encontacta con nuestro equipo en STARK Water.